LAS MONSERGAS DE JUAN PALOMO.

                                                    Por José Villarino, coordinador local de UPYD Yebes-Valdeluz 


‘Vamos a ejercer un control y seguimiento tanto de las acciones del equipo de Gobierno, para que cumpla con los compromisos adquiridos en su programa electoral, como del respeto escrupuloso a la legalidad en todas las actuaciones del Ayuntamiento de Yebes (…) En cuanto a la transparencia y veracidad de la información, nos comprometemos a mantener al corriente a los vecinos de todo lo que ocurra dentro de la institución municipal, de cómo funciona el Ayuntamiento, qué se decide, que sepa lo que sucede aquí dentro (…) No nos vamos a cansar de presentar iniciativas y propuestas, pero también queremos ir más allá y vamos a buscar que los vecinos se acerquen al Ayuntamiento’. Son extractos del discurso de toma de posesión que el Partido Popular pronunció el 13 de junio del año pasado en el Pleno de constitución del Ayuntamiento de Yebes por boca de su portavoz Diego Jiménez Figueroa con motivo de la apertura del curso político 2015-2019.

Traigo a colación estas palabras en su literalidad para que comprueben por sí mismos que no es oro todo lo que reluce. Cuando uno llega de nuevas a un puesto de trabajo, una reunión familiar, un bodorrio, una excursión de ajenos o un cargo público, lo habitual es poner sobre la mesa tus credenciales. En un gesto de buena voluntad y para hacer ver a los demás que tu comportamiento de inicio es amistoso, por si las moscas. Que tiempo habrá para demostrar con hechos si ese carácter era fiable o, en su defecto, una pantomima de tres al cuarto. En el caso que nos ocupa, aquella declaración de intenciones de los peperos saltó por los aires a las primeras de cambio. Vamos, que la arrojaron ese mismo día al cubo de la basura nada más abandonar el Ayuntamiento. ¡Para qué esperar más!

En este primer año de mandato, el Partido Popular de Yebes se ha empleado a fondo en el papel de mosca cojonera. Donde dije digo, digo Diego. Nunca mejor dicho. Si por seguimiento y control se entiende la presentación de una ristra de preguntas utilizando de parapeto el supuesto interés del vecino por asuntos triviales y hasta frívolos, sin fuste ni lustre, pues qué quieren que les diga. Además de ser una táctica tan anodina como remolona, deja bastante que desear. Que tiene como único propósito dar la impresión desde fuera que hacen algo. Aunque sea a costa de recurrir a mentiras, falacias, embustes y tropelías varias. Para qué me voy a molestar en revisar expedientes y documentos si tengo a otros que me hacen el trabajo.

No me negarán que no deja de ser, cuanto menos, ridículo e inaudito que se nos critique desde la oposición por cumplir el programa electoral con el que concurrimos ante los ciudadanos de Yebes y Valdeluz. Como en el caso de la primera tensoestructura con la que hemos cubierto la zona infantil más frecuentada del Parque de la Paz y los Derechos Humanos. O el desarrollo de la tercera fase del Centro Deportivo Municipal ‘Valdeluz’. Están en su derecho de poner en solfa aquello que les incomoda y que el vecino de a pie aprecia. Pero no a costa de refutar sus propios argumentos. Porque ese modo de proceder solo tiene un nombre: la extravagancia de la que hace gala aquel que no sabe si va o viene.

Mención aparte merece el capítulo ese de la transparencia y veracidad de la información. Como alguno de ustedes sabrá (y si no ya se lo cuento yo, aunque sea publicidad gratuita), el PP de Yebes dispone de un blog que utiliza de arma arrojadiza contra el equipo de Gobierno. Con el que da rienda suelta a esa aversión y antipatía con la que ha inquinado todos y cada uno de sus alegatos, decisiones y actuaciones. Que tienen casi siempre al alcalde en el punto de mira. Pero también a algunos miembros del equipo de Gobierno. E incluso a vecinos y funcionarios. Y que en ocasiones les viene como anillo al dedo para retractarse de los contrasentidos en los que incurren. Un día sí y otro también.

Con este bochornoso ejemplo seguro que entienden a qué me refiero. En el Pleno del 8 de abril, el único concejal del PP de Yebes que asistió a aquella sesión, que responde al nombre de Ángel Álamo, dio lectura a una batería de 34 preguntas que, al parecer, eran el ‘resultado de la fiscalización’ que los populares habían hecho de la gestión del equipo de Gobierno en estos primeros meses de mandato. Y de esa hipotética preocupación de los vecinos, que les habían pedido que diesen traslado de ellas al Pleno. Como están reñidos con el trabajo y son unos haraganes de tomo y lomo, dejaron pasar nada menos que 24 días para informar a los vecinos de tamaña iniciativa. A partir del 2 de mayo, iniciaron un serial en el que desgranaban uno por uno los enunciados de cada pregunta. Que iban acompañados de la correspondiente argumentación y, en la mayoría de los casos, una interpretación subjetiva y torticera que bien podía interpretarse como respuesta. Vamos, lo que se dice un Juan Palomo de manual: yo me lo guiso, yo me lo como. ¡¡Para qué esperar a las contestaciones del Gobierno municipal si podemos tergiversar y manipular lo que nos venga en gana, que para eso estamos en posesión de la verdad!!

Pero hete aquí que a estos tunantes de medio pelo les fallaron los cálculos. Con fecha 1 de junio, el equipo de Gobierno convocaba Pleno de carácter extraordinario en cuyo Orden del Día se incluían las respuestas a las preguntas formuladas en su día por el Partido Popular. Esa convocatoria les pilló con el paso cambiado y con apenas 20 preguntas expuestas y convenidas en el blog. Llegó el día y el alcalde dio lectura en aquella sesión a todas y cada una de las 34 interpelaciones que había formulado el Partido Popular. Evidentemente, no eran las explicaciones que esperaba la oposición. Que para eso ellos ya se habían hecho su composición de lugar. Así que se les planteaba una disyuntiva: ¿qué hacemos ahora que tenemos las contestaciones a las preguntas? Pues la maniobra estaba más clara que el agua.

Hay una moraleja que algunos convierten en dogma de fe para justificar sus comportamientos. Es esa que reza ‘nunca dejes que la realidad te estropee un buen titular’. ¡Esas respuestas en Pleno no son para ellos, que están investidos de la razón absoluta e indiscutible! Estos señores del PP que se jactan de pedir explicaciones, no necesitan contestaciones que valgan. Así que ahí les tienen, a lo suyo. Ellos siguen erre que erre. A vueltas con esas monsergas de Juan Palomo en forma de preguntas y respuestas en el blog. En las que echan mano de esa treta rastrera, que es tan antigua como la Humanidad, del calumnia que algo queda. Este es el pelaje del que está hecho el Partido Popular de Yebes y sus adláteres. Pues saben lo que les digo, que si no quieren trabajar ni arrimar el hombro al menos dejen de molestar.